Lección 10 Trimestre 6

Lección 10

Cuidando el Templo de Dios

Objetivo: Que los niños aprendan que debemos cuidar nuestro cuerpo, para no dañar el templo de Dios.

Base Bíblica: 1ra Corintios 6:19, Proverbios 6:17-19.

Texto Clave: Salmos 139:13

Materiales: Biblia, juego de memoria de partes del cuerpo, carteles para mostrar al momento de la historia, historia de Pablito, páginas del alumno.

Canto: A mi me hizo Dios

 //A mi me hizo Dios me hizo por entero,

del dedo de mi pie hasta mi cabello, 

por eso no me pueden venir a lastimar,

 mi cuerpo es sagrado, siempre puro debe estar,

 mi cuerpo merece respeto y valor 

pues yo soy un presente del Dios Creador//

Pues yo soy un presente del Dios Creador

Introducción: Da la bienvenida a cada uno de los niños, pregunta si se acuerdan de lo que vimos la clase pasada (da tiempo para que respondan, deben ser breves), menciona que hoy seguiremos aprendiendo de ello, repasen el canto para que se lo sigan aprendiendo, después cuenta la historia de un niño llamado Pablito. recalca que Pablito no cuidaba el templo de Dios y que por eso tuvo esas consecuencias. Hoy aprenderemos como aprender a cuidar nuestro templo, ya vimos que nosotros somos el templo de Dios entonces debemos saber como cuidarlo. Pongan mucha atención.

Historia: Salomón escribió en Proverbios de que cosas debemos tener cuidado, vamos a ver que cosas son.

1. Ojos altivos:

Dice que debemos cuidarnos de los ojos altivos y ¿Cuáles son los ojos altivos? Una persona que tiene ojos altivos es muy orgullosa, soberbia, se cree autosuficiente y cree que no necesita la ayuda de nadie y mucho menos de Dios, todos necesitamos ayuda en algún momento y debemos aprender a recibir esa ayuda que nos dan, y darle gracias a Dios, aveces en la escuela con tu tarea, algún amiguito lo aprendió y quiere enseñarte, o cuando hacemos deporte y nos cuesta más aprender como saltar la cuerda por ejemplo, debemos aceptar o pedir ayuda para que nos enseñen y podamos aprender.

2. Lengua mentirosa:

Cuantos de nosotros hemos dicho mentiras, debes de tener cuidado de decirlas a Dios no le agrada y cuando dices una mentira dañas el templo de Dios, ya vimos que aunque nos cueste debemos ser valientes para decir la verdad siempre.

3. Manos derramadoras de sangre:

A Dios no le agrada que dañemos a nuestro prójimo, recuerdas la historia de Caín y Abel, donde Caín se enojó porque a Dios le agradó más la ofrenda de Abel, y que hizo Caín mató a su hermano y eso estuvo muy mal y tuvo consecuencias por haber hecho eso, tal vez nosotros no hemos matado a alguien, pero haber cuántos le han pegado a alguien, o lo han lastimado hasta el punto de que le salió sangre de la nariz  o en algún otra parte, o lo haz empujado de tal manera que se lastimó la cabeza, eso no está bien pues a Dios no le agrada y si lo haz hecho debes arrepentirte, y pedir perdón a Dios porque haz dañado el templo de Dios.

4. Pensamientos malos:

En ocasiones el enemigo nos pone pensamientos malos en nuestra cabezita, como por ejemplo, soy fea, soy gorda, no soy inteligente, a mi nadie me quiere, etc. Esos son pensamientos malos que a Dios no le agrada que pensemos, pues Él nos creó y somos su creación perfecta y si tu piensas eso no cuidas el templo de Dios porque Dios te ama tal cual te hizo, cuando vengan ese tipo de pensamientos debemos de orar y pedirle a Dios que nos ayude a pensar cosas bonitas, como ¡qué bonita soy!, Dios me ama, Dios me cuida, me hizo hermosa, etc.

5. Pies que se apresuren a hacer el mal:

Que significa esto, pues muchas veces nos dice que hagamos algo malo y en vez de decir no, somos los primeros que decimos que si, y eso no está bien, pues dañamos el templo de Dios, debemos de frenarnos para hacer cosas malas y pedirle a Dios que nos ayude, decirle Papito Dios hoy quise ir corriendo a hacer cosas malas pero se que a ti no te agrada ayúdame a no hacerlas, porque no quiero dañar mi cuerpo que es tu templo.

6. testigos falsos:

 Cuantas veces nos ha tocado ver algunos sucesos de algo malo y eso ya nos convierte en testigos, por ejemplo cuando vemos que alguien le pegó a un niño, o que lo maltrató y como testigos de lo que vimos nos preguntan y mentimos y decimos que fue alguien más o que no vimos nada, eso no le agrada a Dios por es igual que estar mintiendo, debemos teber cuidado con eso.

7. Sembrar discordia: 

Que es sembrar discordia, es provocar que alguien se enoje con otra persona, por ejemplo decirle a alguien mira María me dijo que como tu eres gorda y fea, que le caes mal que no te quiere y muchas más cosas y provocamos que esa persona se enoje con María en este caso y muchas veces son inventos de nosotros, eso no le agrada nada a Dios, esa es una manera en la que no estamos cuidando el templo.

Conclusión: Cuántos de nosotros no hemos cuidado el templo de Dios es decir, nuestro cuerpo y hemos hecho algunas de estás cosas que menciona Proverbios, eso está mal de ahora en adelante tendremos cuidado para cuidar nuestro cuerpo de estás cosas que no le agradan a Dios.

Actividad: Páginas del alumno

Historia de Pablito:

En una pequeña casa vivía un niño llamado Pablito que no le importaba cuidar su cuerpo. Su mamá le pedía que se bañara, lavara las manos, pero el niño no hacia caso a lo que decía su mamá. Pero su mamá un día le dijo a Pablito, “vamos a tener una conversación muy importante, te quiero decir por qué es importante mantener limpio el cuerpo. Tal vez por estar jugando afuera te ensucias las manos. ¿Si no te las lavas antes de comer, qué puede suceder? Nos podemos enfermar. Si mantenemos las manos sucias podemos enfermarnos.” Pero Pablito no le hizo caso a su mamá y no se lavaba las manos, así que un día se enfermó mucho y estaba muy triste porque no había obedecido a su mamá. Pablito ahora ya no sonreía porque tenía alergia en toda su piel, porque no limpiaba su cuerpo a diario. Así que un día decidió obedecer a su mamá y se bañó. Desde ese día Pablito es un niño limpio y alegre, pues no volvió a tener esa fea alergia en su piel. Es muy importante que limpiemos nuestro cuerpo, si no lo hacemos estaremos cometiendo un atentado contra el y no estaremos cuidando el templo del Espíritu Santo y el Espíritu Santo se pondrá muy triste. Entonces la mamá de Pablito le dijo, “hijo, ¿ves lo importante que es limpiar nuestro cuerpo?” Entonces Pablito le contesto si mamá, “te prometo que me bañaré y estaré siempre limpio para mantener la casita del señor siempre limpia y ordenada. De esta manera Él se sentirá contento y yo también. Jesús quiere que mantengamos limpio el cuerpo.

Aquí puedes descargar los carteles.